La artrosis es una enfermedad inflamatoria crónica y no puede tratarse sólo en sus fases agudas
Médicos de familia reunidos en Úbeda defienden la eficacia y la seguridad de los SYSADOA para el tratamiento base, en fase crónica, de la artrosis
En Andalucía, un 166% de la población sufre artrosis de rodilla, mano o columna, según datos de la Sociedad Española de Reumatología. Esto significa que hay más de 1.200.000 personas que tienen dolor y dificultad para realizar movimientos, viendo afectada así su calidad de vida. Tal y como ha explicado el Dr. Sergio Giménez, médico de familia y coordinador de Grupo de Trabajo de Aparato Locomotor de SEMERGEN, casi todos los pacientes con artrosis son tratados en Atención Primaria y nosotros somos quién más los conocemos. Concretamente, la artrosis es la causa del 35% de las consultas que se atienden en Atención Primaria.
Para el Dr. Giménez, uno de los factores que hay que tener presentes en el manejo de los enfermos artrósicos es que más de la mitad de los que vemos en nuestras consultas tienen un elevado riesgo gastrointestinal o cardiovascular pero aún así existe una inercia terapéutica, una tradición de recetar paracetamol y AINE sin tener en cuenta que ésta es una medicación para las fases agudas de la enfermedad, que no se puede administrar de forma crónica debido a sus efectos secundarios.
La Dra. Maribel Lucena, Catedrática en Farmacología Clínica, ha añadido que hay que tener en cuenta los denominados fármacos SYSADOA, como el condroitín sulfato, que son específicos para el tratamiento de la artrosis crónica y han demostrado un elevado perfil de eficacia y seguridad en numerosos ensayos clínicos. Según la Dra. Lucena, estos fármacos conducen a una mejora de la calidad de vida del paciente, que ve reducido su dolor y mejorada su capacidad funcional, y por lo tanto a una disminución del coste global de la enfermedad.
En este sentido, para Dr. Giménez los SYSADOA son, a día de hoy, el tratamiento de base de la enfermedad, especialmente en fases iniciales y en pacientes de riesgo, y además son fármacos seguros puesto que no se han registrado efectos tóxicos desde 1982. Además, ha explicado que tienen un demostrado efecto sintomático, antiinflamatorio y que son, posiblemente, modificadores del curso de la enfermedad. Y concluye: nuestra práctica clínica nos dirá de forma definitiva si estos fármacos son eficaces para el tratamiento de nuestros pacientes. La medicina basada en pruebas está ahí, pero los resultados los vamos a ver en nuestros pacientes y en el día a día.
Estas son las conclusiones del simposio La artrosis: una enfermedad de todos, que se ha realizado hoy en Úbeda, en el marco del 7º Congreso Andaluz de Médicos de Atención Primaria, SEMERGEN, donde también se han repasado las nuevas Guías SEMERGEN en Artrosis, un documento de consulta de referencia para los médicos de cabecera que recoge de una manera sencilla pero rigurosa, todas las actualizaciones recientes en artrosis, especialmente lo relacionado con la etiopatogenia y el tratamiento.