Se trata un ensayo clínico en fase IV, aleatroizado, doble ciego y controlado con placebo, presentado en el XXVI Congreso de la Sociedad Española de Farmacología Clínica
El procedimiento consistió en aplicar un estímulo doloroso a los pacientes en la rodilla y ver su respuesta cerebral con resonancia magnética funcional
Los pacientes que recibieron condroitín sulfato experimentaron una mayor reducción de la activación cerebral en respuesta al dolor
Los resultados del estudio son consistentes con la conocida acción sintomática y modificadora de la progresión de la enfermedad del condroitín sulfato, y apoyan la utilidad de la resonancia magnética funcional como técnica objetiva para valorar los efectos de un fármaco
Un nuevo ensayo clínico presentado en el XXVI Congreso Sociedad Española de Farmacología Clínica (SEFC), celebrado en Cádiz, demuestra la eficacia del condroitín sulfato en la reducción de la activación cerebral en respuesta al dolor en pacientes con artrosis de rodilla. La principal novedad del estudio es la técnica empleada: el análisis objetivo de respuesta cerebral al dolor mediante resonancia magnética funcional.
Se trata de un ensayo clínico en fase IV, aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo, realizado por los Servicios de Reumatología y Neuroimagen del Hospital del Mar de Barcelona y la compañía española Bioibérica Farma. Participaron un total de 64 pacientes con artrosis de rodilla que recibieron 800 mg al día de condroitín sulfato o placebo. El procedimiento consistió en aplicar un estímulo doloroso a los participantes, provocado por la presión en la rótula (una maniobra con repercusión directa sobre el cartílago) y ver su respuesta cerebral con resonancia magnética funcional. La medida principal de eficacia fue la disminución de la señal cerebral en respuesta al estímulo doloroso.
Los pacientes artrósicos que recibieron condroitín sulfato experimentaron una mayor reducción de la activación cerebral en respuesta al dolor provocado por la presión en la rótula en diversas regiones cerebrales (pEs importante remarcar que el efecto del condroitín sulfato se ha manifestado en la sustancia gris periacueductal y en las áreas motora y somatosensoriales de la corteza cerebral, que son elementos esenciales en la fisiología de la respuesta al dolor”, explica el Dr. Jordi Monfort, investigador principal del estudio y reumatólogo del Hospital del Mar de Barcelona.
Estos resultados son consistentes con la conocida acción sintomática y modificadora de la estructura del condroitín sulfato y responden a una técnica objetiva. “Un problema inherente a la valoración de la eficacia de un fármaco para el dolor es la falta de objetividad de los instrumentos disponibles para medirlo. En este sentido, la resonancia magnética funcional ha demostrado ser una técnica muy prometedora para objetivar los efectos del tratamiento para el dolor en la artrosis”, añade el Dr. Monfort.