Cada 10 de noviembre desde hace 21 años se celebra el Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo. Fue en 1999 cuando en Budapest se celebró la Conferencia Mundial Sobre la Ciencia y se asumió el compromiso de emplear la ciencia en beneficio de las sociedades internacionales con el fin de promover la paz y acabar con la pobreza. Porque el fin de la ciencia no debe ser otro que velar por el bien de todos, con el único objetivo de apostar por la vida.
Aunque la curiosidad del ser humano le ha llevado a intentar entender la naturaleza desde siempre, Galileo en el siglo XVI está considerado el padre de la ciencia moderna. Él fue quien a través del método científico promovió la observación como base de cualquier opinión y teoría. En este sentido sentenció que “El estudio de la naturaleza no debe guiarse por opiniones sin fundamento, sino más bien, se requiere de observar y verificar experimentalmente las hipótesis que se proponen".
La manera de trabajar de Galileo, el protocolo empleado en sus investigaciones, dio paso a lo que hoy en día conocemos como método científico. Se trata de una metodología de trabajo -para obtener conocimientos nuevos- que se caracteriza por un conjunto de prácticas que pretenden o bien reforzar o bien descartar una hipótesis. Y así es como, poco a poco, la ciencia avanza a favor de la vida, del conocimiento y también de la salud.
En este sentido, según la UNESCO, la ciencia “Nos permite vivir más tiempo y mejor, cuida de nuestra salud, nos proporciona medicamentos que curan enfermedades y alivian dolores y sufrimientos, nos ayuda a conseguir agua para nuestras necesidades básicas –incluyendo la comida–, suministra energía y nos hace la vida más agradable, pues puede desempeñar un papel en el deporte, la música, el ocio y las últimas tecnologías en comunicaciones”.
Bioiberica se define como una compañía global del sector de las ciencias de la vida y, por lo tanto, la ciencia es parte fundamental de nuestro ADN.
Esta visión y compromiso corporativos quedan más que plasmados en nuestro eslogan “Taking life science further”. Con este objetivo, identificamos y desarrollamos a través del rigor científico, moléculas de elevado valor biológico que contribuyen a mejorar la salud y el bienestar de las personas, los animales y las plantas.
Trabajamos siempre siguiendo los criterios del desarrollo y evaluación de biomoléculas basados en evidencias científicas, es decir, utilizando un enfoque dirigido a optimizar la toma de decisiones. Siempre, eso sí, dando prioridad al uso de evidencias provenientes de investigaciones correctamente concebidas y convenientemente llevadas a cabo a través del método científico siguiendo las enseñanzas de Galileo. El objetivo primordial es que la actividad del departamento de I+D de Bioiberica, conformado por un equipo multidisciplinar de científicos y tecnólogos, se fundamente en datos científicos y no en suposiciones o creencias.
Javier Velasco, Quality & R&D Director en Bioiberica, asegura que el ritmo al que avanzan la ciencia y las tecnologías “es cada vez mayor”. Por ese motivo, y porque apostamos por la constante innovación, “en Bioiberica realizamos una vigilancia tecnológica constante que nos permite estar al día de las últimas tendencias en la investigación biomédica”, concluye Velasco.
De entre todas las tecnologías emergentes y aplicadas por nuestra compañía, Velasco destaca el papel fundamental de las conocidas como “ómicas” que hacen referencia al estudio de un gran conjunto de moléculas de una misma tipología. Esto permite un conocimiento muy profundo de un producto complejo, una muestra biológica o un organismo en estudio. Estas tecnologías dan paso a distintos campos interdisciplinarios como la genómica (conjunto de genes), la proteómica (estudio de todas las proteínas de una muestra) o la microbiómica (conjunto de microorganismo presentes en un ecosistema).
En el caso concreto de Bioiberica, empleamos la proteómica para caracterizar los péptidos bioactivos en nuestros productos para salud animal con Palbio, una fuente proteica de alta calidad que contribuye al mantenimiento de la salud de los animales; la microbiómica que nos permite estudiar cómo nuestros productos bioestimulantes como TerraSorb favorecen el desarrollo de una microflora más saludable en los suelos de los cultivos, o la glicómica para caracterizar en profundidad nuestros glicosaminoglicanos como la heparina o el condroitín Sulfato).
Como expertos en salud, nuestro principal objetivo en los próximos años es seguir ofreciendo a nuestros partners soluciones innovadoras y sostenibles con las máximas garantías de calidad y seguridad respaldados por la estrategia “One Health”.
En Bioiberica, más de 45 años avalan nuestra trayectoria y experiencia en el desarrollo de nuevos ingredientes de alto valor biológico que complementen nuestro actual porfolio, sin dejar de lado la constante investigación y actualización de todos los productos que ya tenemos en cartera con una mirada puesta al futuro siempre.