Las empresas de las ciencias de la vida buscan socios estratégicos

Hace pocos días, en el marco del Foro Peter Drucker en Viena los expertos en management remarcaron el poder de los ecosistemas donde varios actores establecen sinergias y aumentan la experiencia y el valor de los servicios y productos para los clientes. Un ecosistema también significa tener empresas atentas a las oportunidades para innovar. Cuando esto ocurre en el sector de las ciencias de la vida, el impacto en el bienestar de las personas, los animales y las plantas es muy positivo.

Sólo en España, donde está la sede de Bioibérica, el ecosistema de las ciencias de la vida engloba a unas mil empresas farmacéuticas y biotecnológicas (para ser más realistas tendríamos que sumar las de servicios científicos y salud digital, dato del cual no disponemos). Y, como base, el país cuenta con una investigación académica de excelencia que lo situa en la novena posición mundial en producción en biotecnología.

Si nos centramos en la salud humana, hay que remarcar que el desarrollo de medicamentos y nutracéuticos innovadores ha evolucionado mucho durante la última década y se prevé que siga así junto con las soluciones transversales que mejoren el diagnóstico, el tratamiento, el seguimiento monitorizado y el adherencia del paciente (principalmente en enfermedades crónicas). Es evidente que en este caso, el internet de las cosas (IOT) y la inteligencia artificial tendrán un papel clave.

Considerando que el desarrollo de productos y servicios para la salud es complejo y largo, colaborar estrechamente con un socio puede ayudar a:

• Mantenerse al frente de las tendencias de mercado y dar respuesta a las necesidades de los pacientes.
• Disponer de equipos especializados, tecnología de última generación y una red global (distribuidores, prescriptores, regulatorio...).
• Conseguir una mayor fiabilidad del nuevo producto o servicio (calidad, plazos de lanzamiento y resultados).

El Informe Asebio cita que en España se llevaron a cabo 198 alianzas y 86 lanzamientos de nuevos productos en 2018.

En Bioibérica buscamos constantmente partnerships estratégicos con la industria farmacéutica, nutracéutica, veterinaria, de nutrición animal y agrícola para que nuestras biomoléculas de origen animal se transformen en productos de alta calidad. Uno de los últimos casos de éxito que nos gusta explicar es con Apsen y nuestro ingrediente natural b-2Cool® (procedente de esternón aviar) para un producto estrella para la salud articular en Brasil.